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Siempre rodeado de la polémica y el debate, el Salón Erótico de Barcelona lleva años buscando un formato que se adapte a los nuevos tiempos, que siga manteniendo el gancho, pero dejando de lado la sordidez y los discursos violentos y machistas que rodean al mundo del porno. Un equilibrio bastante complicado.
Después de unos años marcados por vídeos promocionales que intentaban lavar la imagen y proponer nuevas lecturas de su formato, 2023 parece que no será un ejercicio que pasará a la historia del Salón Erótico de Barcelona.
El responsable del evento, Juli Simón, ha confirmado al digital Metropoli que este año no habrá edición del evento. Los numerosos aficionados se quedan, por tanto, sin las actividades y el sexo en vivo que hasta ahora había sido el principal reclamo.
Las razones de la cancelación del Salón Erótico de Barcelona
Aunque este año se cancele por primera vez desde 1992 –con la salvedad de las ediciones de la pandemia–, el Salón Erótico no baja la persiana definitivamente.
Las razones de la anulación son estructurales, porque en realidad preparan "un cambio radical, pero que necesita tiempo", aseguró Simón en declaraciones al digital.
No hay detalles sobre la renovación que se prevé para 2024, pero podrían ir en la línea del Salón Erótico 2022, celebrado en el Pabellón Olímpico del Vall d'Hebron, una edición que se reclamó como un "espacio de descubrimiento sexual feminisita, diverso e inclusivo", en el que el sexo explícito se mostró en espacios reservados.