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Con el Black Friday todos podemos llegar a perder el norte. Pero, ojo, no dejemos de tener los pies en la tierra. En las compras que hacemos a través de la red debemos ser muy cuidadosos y no caer en trampas que nos pueden salir muy caras. Debemos tener algunas cosas claras:
- Escoger lo que necesitamos y lo que no. Es decir, hacer un consumo responsable. ¡Nuestra economía nos lo agradecerá!
- Escoger comercios de confianza, que utilicen un protocolo de transferencia seguro (atención a la https) y que tenga un certificado digital válido (lo encontraréis en el icono del candado al lado del enlace).
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- Verificar que los datos de contacto, envío, pago y condiciones de servicio de la web sean claras y visibles.
- Desconfiar de ofertas irresistibles y espectaculares que recibimos por Whatsapp, por correo electrónico o a través de cualquier red social. La mayoría de veces son casos de ‘phishing’, o lo que es lo mismo, estrategia para conseguir datos personales o bancarios con una finalidad poco lícita.
- No utilizar ordenadores o redes públicas que puedan haber sido manipuladas para obtener información privada.
- Escoger un sistema de pago seguro que nos garantice la confidencialidad de los datos, como por ejemplo Paypal y las plataformas Visa Certified y MasterCard Certification.
Y sobre todo, sobre todo, sobre todo, si tenemos la más mínima sospecha que hay algo que chirría, cancelemos la operación.