[title]
¿Has intentado alguna vez escribir una canción? ¿Eres de los que tienes bastante con disfrutar de la música de tus ídolos o bien se te activa el acto reflejo de querer emularles? Si alguna vez has sentido este pinchazo y has caído en la tentación de adentrarte en el río de la creación musical, el tío Jeff Tweedy está aquí para darte un empujón.
El líder de Wilco, uno de los grupos de rock alternativo más importantes de los últimos tiempos, ha escrito 'Como componer una canción' (Contra, 2021), un libro que servirá tanto a los que nunca lo han intentado pero quieren saber qué se siente al hacerlo, como a los que ya estáis versados en ello, porque siempre va bien apropiarse de algún truco de otro compositor –cambiando de estrategia llegaremos a nuevos resultados–.
Bienvenidos al (no tan) misterioso mundo de la creación musical:
1. No pasa nada si no sabes música
No te estreses si no sabes música, muy a menudo lo que hace falta es una motivación para querer empezar a aprender. E intentar crear una canción es un muy buen aliciente para aventurarse a estudiar un instrumento. Ahora bien, no te esperes a tener el título del conservatorio para empezar, porque quizás entonces ya habrás perdido la inspiración. Todos tenemos un sentido musical y para Tweedy es suficiente con cualquier cosa que tengas a mano. Si sabes hacer dos o tres acordes con una guitarra o el instrumento que sea, mucho mejor, si no, siempre puedes picar en una mesa, o en una caja, probar melodías en un teclado o investigar las muchas herramientas tecnológicas que podemos utilizar hoy en día. Lo importante es tener la chispa, sentir que quieres decir algo en forma de canción, el resto ya saldrá.
2. Piensa en ello las 24 horas del día
¿Cómo? Si tengo que trabajar, estudiar, ir de compras, al gimnasio, hacer la colada, preparar la cena... Otra vez, no nos estresemos. Se trata de tener el chip puesto las 24 horas del día. Tweedy es un profesional de la música y tiene un horario muy bien delimitado que le ayuda a ser productivo incluso cuando duerme (tiene la teoría de que mientras dormimos solucionamos problemas que nos hemos llevado a la cama; de repente, por la mañana, lo vemos más claro). Nadie te impide pensar en tu canción, sea letra o melodía, mientras vas al trabajo, mientras esperas a alguien o para hacer más agradable una labor mecánica. Es a esto a lo que se refiere el bueno de Jeff.
3. Juega con las palabras
Si te enganchan el Paraulògic o el Wordle, entonces te encantarán los juegos de palabras que propone Tweedy en el libro. Él tiene unos cuantos, pero puedes inventar otros nuevos. Aquí de lo que se trata es de provocar asociaciones de ideas a las que nunca llegarías con el pensamiento racional. La mayoría de estas asociaciones no te servirán para nada, pero quizá de repente descubrirás un estribillo de hit en un par de palabras que nadie había atinado juntar antes. ¿Te suena lo de "Imposible Germany, unlikely Japan"...? Pues eso.
4. Anótalo/grábalo todo
Tweedy es de apuntarlo todo. Una conversación de terceros con un giro inesperado, una frase cogida al vuelo en la calle, una idea que te ronda por la cabeza, un titular de las noticias... Todo es susceptible de aparecer en una canción. Lo mismo ocurre con los sonidos, Tweedy graba todo lo que le parece interesante, no solo lo que toca y canta de forma improvisada para que aparezca la inspiración, sino también lo que encuentra interesante cuando va por la calle. Después, escucha y lee lo que ha ido registrando en busca de ideas que le puedan servir para una canción; como las palabras, una idea suelta puede no decirnos mucho, pero puesta en relación con otra distinta quizás haga saltar la chispa.
5. Ropa
Pero, pero, pero... ¿robar no está penado? Sí, y el plagio es una de las prácticas más vergonzosas que existen, porque es un robo sin gracia. Lo que debes hacer es robar con ingenio. Además, la originalidad, si existe, está sobrevalorada, no hay artista que cree a partir de nada. Tweedy utiliza ruedas de acordes, melodías y 'samples' de otros autores como fuente de inspiración para componer sus propias creaciones y tú deberías hacer lo mismo. No se trata de coger algo que ya está hecho y presentarlo como una creación tuya, sino de tomarlo como punto de partida para una composición nueva. Se ha hecho toda la vida y se seguirá haciendo siempre, sea en el pop, en la clásica o el jazz.
A todas las canciones como ventanas, abiertas lo justo para que podamos escaparnos
Y si quieres más consejos, aprovecha que el cantante de Wilco es generoso y no se lo queda todo para él. En 'Cómo componer una canción' dice esto: "Me gustaría dedicar este pequeño y esperanzador libro a todas las canciones por venir. A las tuyas y a las mías. A todos esos momentos que están por llegar en los que nos encontramos ante una posibilidad que no habíamos previsto. A todas las canciones como ventanas abiertas lo justo para que podamos escaparnos, y a todas las canciones como ventanas cerradas y lo suficientemente nítidas a la luz tenue para ver nuestro propio reflejo y recordarnos quiénes somos".
Ah, y recuerda que Wilco actúan en Barcelona el 22 de junio en el Poble Espanyol.