Kathy Sey ('Olympia', de Carlota Subirós)
Foto: Marta Mas / Teatre LliureKathy Sey ('Olympia', de Carlota Subirós)

Reseña

Olympia

3 de 5 estrellas
Carlota Subirós hace un viaje hacia su memoria personal con la ayuda de seis actrices de primer nivel y la música de Paco Ibáñez
  • Música
  • Teatre Lliure: Gràcia, Vila de Gràcia
  • Crítica de Time Out
Andreu Gomila
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Time Out dice

La intimidad es un terreno pedregoso y abrirse en canal para exponer anhelos, frustraciones, esperanzas y remordimientos nunca es fácil, más aún en un teatro, donde, por mucho artificio que pongas, todo acaba viéndose. En los últimos años, hemos visto experimentos brillantes al respecto, como el 'By heart' de Tiago Rodrigues, donde, a partir de un soneto de Shakespeare, repasaba la historia de su abuela. O el 'Seuls' de Wajdi Mouawad, donde relataba la muerte de su padre. No es el caso de 'Olympia', que Carlota Subirós ha estrenado en el Lliure.

De entrada, los grandes espectáculos anteriores estaban protagonizados por los mismos autores, dramaturgos y directores que subían ellos mismos al escenario para contarnos una historia, lo que otorgaba un punto de verdad a la propuesta. Y Subirós ha decidido utilizar a seis actrices polivalentes y de primer nivel (Lurdes Barba, Paula Jornet, Vicenta Ndongo, Neus Pàmies, Alba Pujol y Kathy Sey) como intermediarias, en una puesta en escena que recuerda mucho a la que dirigió de 'La plaça del Diamant'. Además, la propuesta de la directora tiene un aire demasiado abstracto. Hay que ser muy 'insider' para captar todo lo que dicen las intérpretes. Al mismo tiempo, hay demasiados lugares comunes.

Si 'Olympia' nos hubiera traído a la misma Subirós al escenario, ¿la cosa sería diferente? Seguramente

'Olympia' es un espectáculo que funciona a nivel teórico. Nos quiere hablar de la emoción, de la fuerza de la poesía, del teatro como refugio ante el mundo. Pero le cuesta atravesar la cuarta pared si no tienes cierta edad. Habla de poética, pero le falta poesía.

Utiliza, por ejemplo, los recuerdos personales de la infancia, cuando, con 9 años, se ponía todo el tiempo el disco de Paco Ibáñez en el Olympia de París, y sentía que el público gritaba “libertad, libertad”. Aquello fue un faro. Pero también un espejismo: la 'realidad' no era eso. Dice que primero vino la decepción, luego la diversión, más tarde el desengaño y, finalmente, el mundo que tenemos. En el teatro, encontró un lugar donde todo era posible, como el mundo al que aspiraba.

Si 'Olympia' nos hubiera traído a la misma Subirós al escenario, ¿la cosa sería diferente? Seguramente: la forma de carta dirigida a una desconocida que tiene la dramaturgia sería mucho más diáfana. A pesar de todo, la puesta en escena es bonita. Tenemos tres actrices que cantan como los ángeles (Jornet, Sey y Pàmies) y una propuesta visual que te atrapa. Los arreglos musicales de Jordi Cornudella también son excelentes.

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Detalles

Dirección
Teatre Lliure: Gràcia
Montseny, 47
Gràcia
Barcelona
08012
Transporte
Fontana (M: L3)
Precio
12-32 €

Fechas y horas

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