[image]
[title]Molly Burch parecía predestinada a hacer canciones. Cuando era pequeña, mientras la mayoría de niños y niñas de su edad jugaban con playmobils o videojuegos, veía desfilar artistas por casa con total naturalidad: su padre era productor musical y su madre directora de casting. De esta conjunción sólo podía salir brillantez y talento, como así fue. Además, Burch, que vive en Austin pero nació a Los Angeles, decidió estudiar música de muy joven, poco después llegarían las primeras canciones, influenciadas por los discos que oían en casa: de los Everly Brothers a Sam Cooke.
Con este panorama, era cuestión de tiempo que apareciera el primer disco de estudio de esta californiana, 'Please be mine', publicado por la prestigiosa discográfica neoyorquina Captured Tracks, casa de bandas tan influyentes como Mac Demarco, Chris Cohen y The Soft Moon. El elapé de debut de Burch, que puede recordar desde las voces de las Shirelles hasta el carácter mutando de Angel Olsen, se inspira en las melodías de los 60 y la canción de autor norteamericana, todo pasado por el filtro de la nueva oleada indie-folk norte americano.
Temas melancolicos, de amores que se van, soledat y cierta penumbra. Y pinceladas de luz, claro. Molly Burch hará una gira europea este septiembre y pasará por Barcelona. Será el próximo lunes 18 en Sala BeGood del Poblenou, la primera vez que toque en la ciudad presentando un disco, ya que nos visitó improvisadamente en el bar del Sidecar hace un año.
