Abisme cavall hivern primavera i tornar
© Noemí EliasPau Vallvé
© Noemí Elias

Los grupos catalanes del Festival Cruïlla 2017

La música catalana aporta su grano de arena a la programación del festival Cruïlla

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Nombres como los de Jamiroquai, Pet Shop Boys y Ryan Adams imponen respeto y hacen del Cruïlla uno de los acontecimientos de primera división entre los festivales del país. Son los grupos más llamativos del cartel, pero no tocan solos: un buen número de grupos de los Países Catalanes también disfrutarán de la merecida cuota de protagonismo. Algunas de las bandas locales que subirán a los escenarios del Parque del Fórum atraen multitudes a sus conciertos, como Txarango y Dorian, pero a pesar de congregar a un aluvión de seguidores, tocar en un marco de estas características es toda una motivación, como nos explican los valencianos La Raíz: “Estar en Barcelona ya es una responsabilidad, y hacerlo en un entorno como el de este festival, con este cartel, es todo un lujo”, aseguran.


Pero no todos los protagonistas de este Cruïlla están acostumbrados a estas audiencias. Pau Vallvé, que presentará su nuevo disco doble, 'Abisme cavall hivern primavera i tornar' (2017), es un proyecto popular y de larga trayectoria, pero el ambiente que encontrará en el Besòs es poco habitual. “Es una pasada poder tocar en escenarios grandes, con mucho volumen y para tanta gente", dice Vallvé, que sabe mantener el espíritu crítico ante este tipo de acontecimientos: “No es lo que más me gusta, esto de tener marcas, logos y gente yendo y viniendo buscando más fiesta y diversión que escuchar música atentamente”, explica el cantautor de Barcelona.

Prescriptores de bandas
En el otro extremo de Vallvé y La Raíz está Cala Vento, unos relativos recién llegado a festivales de esta envergadura. Los miembros del dúo esperan “uno de los primeros grandes baños de masas” de su corta carrera como banda: “Queremos estar a la altura y disfrutarlo al máximo, que la gente no viva nuestro concierto como una excepción, sino como una experiencia excepcional”.

Los grupos saben que estos no son los espacios más cómodos, pero tienen claro que se acaban convirtiendo en escaparates perfectos para llegar a un público que, quizá, no les conozca. Los del Empordà Cala Vento destacan, además, la “difusión mediática” de un acontecimiento de estas características, mientras que los miembros de La Raíz lo ven como “una ventana” para descubrir nuevas bandas. El poder prescriptor del Cruïlla es el que consigue que los seguidores de los Dorian Wood acaben viendo un show de los Aspencat, o que proyectos como Enric Montefusco y Oques Grasses se acerquen, como mínimo geográficamente.
Aunque reconoce que no suele ir a demasiados festivales, Pau Vallvé no solo tocará en el Cruïlla, también verá los conciertos de Jamiroquai y Ani DiFranco, para comprobar “si tocan alguna antigua”. Precisamente la banda de Jay Kay también es una petición de Cala Vento, que no quieren perderse el caótico directo de Die Antwoord ni el rap en castellano de Kase O. En el otro extremo, La Raíz se quedarán sin ver a los favoritos: Los Fabulosos Cadillacs, y es que los clásicos conflictos de horarios y coincidencias de los festivales no son un problema exclusivo del público.

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