1. El futuro no pide permiso
Esta temporada visitarán el templo sagrado de la música barcelonesa auténticos renovadores de la clásica. Abanderados de una nueva generación que está incendiando las plateas y rompiendo los diques estéticos de lo que suponíamos que era un músico del género. El pianismo elegante de Víkingur Ólafsson, la intensidad y libertad al teclado de Khatia Buniatishvili, la fantasía barroca de Jakub Józef Orlinski o el rito sinfónico sobrenatural que invoca la batuta de Teodor Currentzis.