La sevillana Alba Molina homenajea a sus padres, los legendarios Lole y Manuel, con un disco de flamenco puro, mágico y valiente. Acompañada por el guitarrista Joselito Acedo, la hija de Lole Montoya y Manuel Molina insufla nuevos matices y emociones a uno de los repertorios precursores del Nuevo Flamenco.