¡Fiestas con buen gusto saboreando los hoteles de la ciudad!

Si necesitáis más de una mesa porque sois familia numerosa, la pandilla de amigos es extensa o lo celebráis con el equipo de trabajo, no os faltarán lugares deliciosos. En el Barcelona Catedral, con una restauración sostenible (de kilómetro cero), equilibrada y saludable, encontraréis unos cuántos clásicos mediterráneos. Podréis escoger entre diferentes menús, todos con la 'escudella' haciendo acto de presencia de una manera u otra, y otros platos más innovadores como podría ser un humus de boniato con tostaditas o una lubina con arroz salvaje, col kale y yogur a la pimienta.
Si queréis sentiros como en casa de los abuelos, haced parada en el Catalonia Ramblas (también de corte mediterráneo) y es que os ofrecerán una amplia la lista de aperitivos que es menester compartir. Todos con el punto maestro del chef: los langostinos, a baja temperatura con salsa tártara; las croquetas con carne de olla; y turrones incluso fuera de sección, como un turrón de foie con mermelada de higos.
El H10 Catalunya Plaza Boutique Hotel os presentará una larga lista de alternativas con influencias internacionales en un edificio histórico y vistas a la plaza, así como el Iberostar Selection Paseo de Gracia. En el primero encontraréis los platos más autóctonos mezclados con otros extranjeros: entre las croquetas de bacalao con romesco o canelones de pato trufados, saltarán a la vista unos gyozas de pollo con salsa curry o un lechón confitado con chutney de manzana. Por otro lado, el Iberostar Selection Paseo de Gracia se decantará más por el mestizaje y variedades 'veggies'. ¿Ejemplos? Bravas de yuca con alioli de ajos asados, canelones veganos o un espectacular 'panna cotta' de té matcha con fruta tropical.
Otro refugio metropolitano a descubrir es el Balmes, que se ha tomado la decoración muy enserio, aplicada incluso al nombre de los menús, a escoger entre el Rudolf o el Cascanueces. Aseguran salmón e ibérico de entrantes y principales con mucha creatividad, como el bacalao confitado con habitas baby y pil pil.
En el centro también el H10 Urquinaona Plaza es una buena propuesta para comidas de empresa, con cocina de autor y salas únicas para esta ocasión. Y, en les Corts, el Derby os propone más de 4 opciones en unas instalaciones que combinan modernidad y confort, donde encontraréis platos como la dorada al grill con parmentier de patata y reducción de merlot o entrecot de becerra con patata al horno y mantequilla de hierbas.
¿Buscáis más bien un refugio en medio de la naturaleza? Pues el Hotel Miramar Barcelona con vistas a Montjuic no os decepcionará. Podréis degustar una cocina con producto de máxima calidad y una buena recopilación de acento europeo.
Todos ellos con menús hechos a medida para una celebración en compañía.

El 25 de diciembre y el día de San Esteve podéis deleitaros con los menús de unos cuántos hoteles, como el Renaissance Barcelona Hotel, el Kimpton Vividora Hotel o el Serras Barcelona, todos con opción vegetariana y un punto de fusión en la cocina en más o menos medida. Contarán, por supuesto, con la 'escudella' con 'galets', la carne asada de San Esteve y los canelones; que en la versión 'veggie' se sustituirán por canelones vegetarianos, sopa vegetal y una cocina otoñal a base de tubérculos y setas. El HCC Montblanc será una buena opción si buscáis emular el recetario tradicional de Navidad sin muchos artificios. Mientras que el Barcelona Princess, un cálido espacio a ras del suelo, os propone todos los tradicionales, con entrantes más innovadores, como podría ser una tartaleta de brandada de bacalao con coulis de pimiento. Y el Hotel Porta Fira sube todavía más de tono la inventiva, añadiendo algunos acompañantes curiosos, como pasa con uno de los posibles segundos, un pollo de corral relleno de Navidad con langostinos, pusse de epinard y cremoso de gamba roja.
En el Barcelona Center, encontraréis un menú de Navidad con gran variedad de propuestas para escoger, desde una suprema de merluza al vapor con americana, carbón vegetal y kale, a un meloso de becerra en su zumo con cremoso de patata a la vainilla, dados de piña grille y tomate seco. Y si os imagináis un lugar con mucha magia, el restaurante del Mercer Hotel Barcelona es uno de los espacios ideales para celebrar estas fechas. Calidad en su cocina, ambiente refinado y tranquilo, y una ubicación de lujo llena de historia: entre los muros de la antigua Barcelona romana.
Un elenco de hoteles que os enamorarán tanto para la comida de Navidad como para el 26 de diciembre.

Nada puede ser más buen augurio que comenzar el año pidiendo un deseo en un hotel de lujo. Seguid la tradición de Fin de Año con sello Michelin en el Monument Hotel donde, si sois amantes del pescado, harán vuestros deseos realidad, con un acontecimiento a gran escala a manos de los chefs Paolo Casagrande (Lasarte 3), Xabier Goikoetxea (Oria 1) y Gabriele Milani (Glasss), bajo la dirección gastronómica de Martin Berasategui.
Una apuesta marinera en la que también se sumergen el Hilton Diagonal Mar Barcelona, el Claris Hotel & Spa GL y el Casa Fuster. Saltarán a la vista los entrantes con variedades de gamba, las ostras, acompañantes de anchoas, principales con cangrejo, y pescados tan interesantes como lenguado o dorada, todos con salsas y acompañantes para hacerlos más exuberantes. El Majestic Hotel & Spa Barcelona y el Hotel El Palace Barcelona os descubren otras opciones más variadas, con un punto más carnívoro, como con un solomillo de buey Wellington con salsa de trufa negra, obra del primero; mientras que en el segundo, os encontraréis un perfecto filete madurado de vaca gallega a la brasa, patata cremosa y trufa negra. De hecho, la trufa repetirá en muchos de los menús de Fin de Año. Como Le Méridien Barcelona, que opta por jugar con los tradicionales a base de vegetales, el ejemplo: milhojas vegetal con trufa negra. Eso sí, todos contarán con postres de ensueño seguidos de la uva, el cotillón y una fiesta memorable, incluso, ¡algunos con djs! La diversión, sin duda, estará asegurada.

Os sentiréis de la realeza en cualquiera de los establecimientos mencionados, pero, si además decidís regalaros una comida de Reyes en un hotel, la experiencia será todavía más verosímil. Saboreadla con la cocina invernal y creativa del Four Points by Sheraton Barcelona Diagonal donde encontraréis delicias como unos ravioli de berenjena asada y scamorza fumada con salsa de queso azul y nueces. Una cocina de otoño con la que también se atreve el elegante Gran Hotel Havana. ¿Una sugerencia a modo de ejemplo? ¿Qué tal un fricandó meloso de becerra y setas de temporada?
Los expertos en canelones del The One Barcelona varían de estilo el día de reyes y se decantan por la tradición, pero con el toque maestro de sus salsas; he aquí el lechón cocinado a baja temperatura, al que le añaden unas texturas de manzana. En el HCC ST Moritz y en el Granados 83 también encontraréis platos icónicos, los típicos de la cocina catalana en alguno de los espacios emblemáticos de los hoteles. Jamón, 'sides' de pimiento del piquillo o setas, tapas de croquetas o calamares rellenos serán sus especialidades. Ahora, si preferís probar los clásicos modernizados por manos expertas, también es buena idea dejarse caer por el Mandarin Oriental, Barcelona, donde podréis degustar una 'coca de recapte' o morcilla con manzana. Y como no podía ser de otro modo, todas las opciones irán con barquillos o roscón coronando la comida.

Ya sabéis, si queréis vivir unas fiestas de Navidad ideales, ¡acercaos a estos hoteles de Barcelona y compartid mesa con los vuestros! La mayoría de ellos también contarán con menús infantiles, para que el placer lo pueda disfrutar toda la familia.