Creación y dirección: Ayara Hernández Holz.
Tríptico de cuerpos sin cuerpos, de hombres-bicho que se mueven en una jungla de sonidos, objetos y otros seres que se atraviesan sin acuerdo, sin contrato. Donde existe una tensión constante entre ser un cuerpo, tener un cuerpo e inventar un cuerpo; entre lo que se muestra, lo que se esconde y lo que está a punto de aparecer. En esta obra se trabaja en crear una convivencia opaca entre los performers, la escenografía, la luz y el sonido, cada uno de estos elementos tiene una lógica propia, cohabita con los otros sin armonía, desde sus diferencias.