Concepto y coreografía: Arno Schuitemaker. Dramaturgia: Guy Cools. Interpretación: Revé Terborg, Jeni Kasatkina, Stein Fluijt.
Esta pieza, que toma como punto de partida la naturaleza evasiva del amor, se convierte, como en otros trabajos del coreógrafo, en una escena hipnótica, de tráfico. Su trabajo es simple, despojado y elegante. Centrándose en elementos como la progresión rítmica y la repetición, consigue generar una experiencia absolutamente inmersiva e hipnótica para el espectador.