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Este espectacular plato servido como si estuviéramos en Jordania (en una amplia bandeja i rodeado de acompañamientos) es uno de los orgullos de Mohamed, el chef propietario del Omeia, restaurante especializado en cocinas de Oriente Próximo y Magreb, que también presenta muy bien en un solo plato. El mansaf jordano es un plato de cordero, hecho lentamente y con especias orientales, servido después con arroz y carne picada, y regado con una exquisita y suave salsa de yogur natural casero. Es un plato muy sabroso, diferente y que justifica una visita. Previo a este plato es aconsejable compartir en una mesa de amigos el hummus (puré frío de garbanzos), las berenjenas con yogur y los pimientos a la brasa con nueces, una delicia. Después de cerrar el Jasmin, el Omeia es el restaurante donde se come el mejor cuscús de Barcelona.
Omeia
Aragó, 211. T. 93 452 31 79
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