Pocas veces el mundo real se ha parecido tanto a una película del Festival de Sitges como este 2020. El certamen catalán, que se celebra del 8 al 18 de octubre, es uno de los primeros grandes eventos culturales de este otoño todavía excepcional. "Tras superar un primer escenario de mucha incertidumbre, hemos conseguido organizar una edición que mantiene todo el espíritu de Sitges", nos explica su director Ángel Sala. Sin actos paralelos como la popular Zombie Walk, un menor número de invitados, la reducción de títulos seleccionados (50 menos respecto al año pasado) y los protocolos para garantizar la seguridad de todos, Sitges apuesta este año por un formato híbrido. "De los 120 títulos que conforman la programación, más de 70 se podrán ver en línea".
Esta temporada de restricciones en el mundo de la cultura y de sequía de 'blockbusters' de Hollywood es una buena ocasión para reivindicar, como hace Sala, que el papel de los festivales no consiste en "estrenar la nueva de 'El expediente Warren'" sino en dar visibilidad a aquellos filmes que lo tienen difícil para acceder a los espectadores. El director se siente satisfecho porque, en este panorama tan complicado, el certamen acogerá hasta 22 'premières' mundiales y no dejará de ofrecer una representación precisa y variada del estado del fantástico todo el mundo. ¡Celebrémoslo!
Los títulos bomba
El tándem formado por Alexandre Bustillo y Julien Maury, que zarandearon Sitges 2007 con 'À l’intérieur', regresa con 'Kandisha', que evoca el hada marroquina de la venganza. Para Sala, esta será una de las películas que estallarán en Sitges 2020, junto con la aclamada en Sundance 'Relic', de Natalie Erika James; la sci-fi francesa 'Le dernier voyage de Paul W.R.' de Romain Quirot, "en la línea de 'Delicatessen' y el primer Luc Besson", y también 'Archenemy', thriller fantástico de Adam Egypt Mortimer donde aparece como actriz Amy Seimetz, a su vez directora de una de las sensaciones indies de la temporada que veremos en Sitges, la esperada y polémica 'She dies tomorrow'.
Sospechosos habituales
Sitges sigue siendo el escenario ideal para acoger las obras del padre del 'queercore', Bruce LaBruce, que esta vez llega con 'Saint-Narcisse', su revisión deliciosamente retorcida del mito del hombre enamorado de su reflejo. El francés Quentin Dupieux, sacerdote supremo del humor absurdo cinematográfico, presenta con 'Mandibules' una comedia tonta con mosca gigante. Y Brandon Cronenberg, buen heredero de su padre David, aterriza con su segundo y perturbador largo, 'Possessor', "más redonda que la anterior 'Antiviral'", dice Sala.
Vampiras de Barcelona
Nora Navas da vida a Enriqueta Martí, figura histórica de principios del siglo XX a quien el director Lluís Danés quiere rescatar de la leyenda negra que la rodea en 'La vampira de Barcelona'. El cine con producción catalana también estará presente en la inauguración del festival con los zombis que invaden la Guerra Civil en 'Malnazidos' de Javier Ruiz Caldera y Alberto de Toro; y no faltaran tampoco 'Cosmética del enemigo', la adaptación de Amélie Nothomb que ha llevado a cabo Kike Maíllo, y 'No matarás', el debut en el largo de David Victori, con Mario Casas.
Todo es Lynch
La copia remasterizada de 'El hombre elefante' (1980) de David Lynch cerrará una edición que concede el Gran Premio Honorífico al director norteamericano. Por razones obvias, el cineasta no podrá asistir, pero Sala anuncia que, entre las predicciones meteorològicas diarias que hace en su canal de Youtube, Lynch ha encontrado tiempo para preparar un detalle especial para la gala de clausura.