Blake Edwards. EE.UU., 1968. VOSE. 99 '.
Una de las comedias más hilarantes de Blake Edwards, al servicio de Peter Sellers, que aquí no es el inspector Clouseau, pero que lo parece, de tan pesado que resulta el personaje que interpreta, un actor que convierte una agradable fiesta en un auténtico desastre. Es la comedia de Edwards que más lo acerca a los clásicos del cine mudo y la que mejor representa su sentido del humor paródico. Mancini, como siempre, la acompaña con la suavidad y el encanto de sus melodías habituales.