[title]
No íbamos tan desencaminados: después de que el Sónar difundiera el misterioso 'hashtag' #GJ273b, Time Out nos aventuramos a teorizar a que hacía referencia, y bromeábamos sobre la posibilidad de que el festival de Música, Creatividad y Tecnología estuviera buscando nuevos públicos más allá del sistema solar. Y bang! Después de 25 años escaneando el planeta Tierra en busca de músicas avanzadas, ahora el Sónar enfoca su radar hacia el espacio exterior. El objetivo: contactar con una civilización alienígena con el proyecto Sónar calling GJ273b.
En el marco de su 25 aniversario, que celebrará en 2018, los pasados 16, 17 y 18 de octubre el Sónar envió tres transmisiones con destino a GJ273b, un exoplaneta con potencial de albergar vida a 12,4 años luz de la tierra (más de 120 billones de kilómetros). La 'proximidad' de GJ273b y su potencial para albergar vida hacen que la posibilidad de recibir una respuesta sea plausible. En caso de que haya alguien ahí fuera que reciba el mensaje y envíe una respuesta, la recibiríamos en 25 años: oportunamente, para el 50 aniversario del Sónar. Es la primera vez en la historia de la humanidad (!) que se envían señales claras con la intención de establecer contacto a un destino potencialmente habitable suficientemente cercano como para poder recibir una respuesta.
El contenido de las transmisiones son 33 piezas de audio de 10 segundos que el festival ha encargado a artistas de todo el planeta (el nuestro) próximos a su universo como Modeselektor, Laurent Garnier, Holly Herndon, Matmos, Kerri Chandler, Ólafur Arnalds, Kode 9, Soichi Terada, Fatima Al Qadiri, CaboSanRoque y Nisennenmondai, entre otros. Para que os hagáis una idea del tipo de sonidos que el Sónar lanza al espacio, Carsten Nicolai (Alva Noto) ha grabado los latidos del corazón de su hija antes de nacer; Autechre, una pieza con los primeros 449 números primos; Jean-Michel Jarre, una melodía que evoca 'Encuentros en la Tercera Fase'; Nina Kraviz, un clamor de paz; Laurel Halo, un grito de auxilio ( "Please save us!"); la gallega BFlecha, una pieza basada en los ciclos de los ecosistemas terrestres y de toda forma de vida; y The Black Madonna explica cómo se hace un 'hit' musical en la Tierra.
Para sacar adelante esta iniciativa el Sónar ha contado con la colaboración del Instituto de Estudios Espaciales de Cataluña (IEEC) y de METI International (Messaging Extraterrestrial Intelligence), una organización de investigadores con sede en San Francisco que defiende el contacto proactivo con extraterrestres. Y las transmisiones se enviaron desde la antena de la EISCAT (Asociación Científica Europea de Dispersión Incoherente) en Tromsø (Noruega).
Una segunda fase de transmisiones está programada para abril del 2018, y Sónar abre la convocatoria a cualquier creador a participar con una composición original hasta el 1 de marzo del 2018. Entre todas las piezas recibidas, Sónar elegirá tres que se añadirán a las de Squarepusher, Juana Molina, Niño de Elche, Cora Novoa, Lorenzo Senni, Zora Jones, Desierto, LCC y Yuzo Koshiro.
Si la verdad está ahí fuera, el Sónar podría encontrarla.