¿Quieres una pista? En la carta hay palabras en catalán, castellano, chileno, coreano, japonés e inglés, y los platos están clasificados en seis secciones; para abrir la boca, cevichería fina, 'the butcher society', 'sangúche', platillos y postres. ¿Otra pista? Felipe González, el propietario y cocinero, es un chileno culo inquieto que de pequeño cogió gusto en los fogones en los campamentos de los scouts y de joven lo amplió en una residencia de estudiantes de San Francisco hasta que decidió volver a su país para formarse en hostelería. De América Latina dio el salto a Europa y aquí no paró.
Tras ser chef en ruta y pasar por Ibiza y un Michelin de la Costa Brava, hizo parada en Barcelona para organizar eventos gastronómicos y trabajar en el Gran Hotel La Florida, Escribà y Soho House. Define su cocina como post punk. Traducido en platos: una ensaladilla rusa que hace justicia al nombre de la taberna; un cebiche nikkei inspirado en el chef Ciro Watanabe que mira directamente al fondo del mar y un triquini tan bueno que hizo que un día se quedaran sin los ingredientes y un cliente cogiera la bici para ir voluntariamente hasta la Cansaladeria Puig a comprarlos. El patrón es de dónde es, así que la carta de vinos naturales y piscos es sublime. En Otra Cosa encontrarás eclecticismo, creatividad y rebeldía con sensatez y en su justa medida. ¡Atención a los pop-up que organizan!