Las obras de arte de Barcelona que más inspiran a los artistas

En las calles y museos de Barcelona hay más de mil años de arte. Sin interrupciones cronológicas. Y casi siempre, las ruinas del pasado han servido de cantera para construir el presente. Los visigodos edificaron con los restos del imperio romano, lo podéis ver al MUHBA de la plaça del Rei. Y, de vuelta al presente, el artista Antoni Llena hace una cosa parecida con la obra de Joan Miró: “Tienes que dejar que ponga las raíces dentro de ti. Y un día saldrán ramas, hojas, frutos y todo el que haga falta”.

De esto se trata, de dejarse seducir por el arte, sin razonamientos ni prejuicios. De dejar que aquella obra deposite su semilla y acabe dando fruto. ¿No habéis ido a ver una obra muchas veces, como quien visita un amigo? ¿No os habéis sorprendido, en medio de un paseo, con el descubrimiento de un detalle de una obra que habíais visto hace mucho  tiempo, y os ha servido para resolver otro tema que, aparentemente, no tenía nada que ver?

El MNAC, el MACBA, la Fundación Joan Miró, el Museo Picasso y el resto de espacios de arte de la ciudad de Barcelona suman miles de obras en exposición. Y en el catálogo de arte público del Ayuntamiento hay 3.465 obras, que se pueden visitar en cualquier hora y sin pagar entrada. Se trata de una inmensa cantidad de invitaciones al arraigo.

Time Out ha pedido a cinco artistas de diferentes generaciones –Antoni Llena, Frederic Amat, Eulàlia Valldosera, Gino Rubert y Anna Dot– que escojan una obra de arte de Barcelona y que nos expliquen, con sus palabras, como ha influido en su vida y en su creatividad. Han empleado múltiples criterios, siempre sorprendentes.

Algunos de estos artistas tienen, a su vez, obras en espacios públicos de la ciudad. A modo de ejemplo, el 'Homenaje als castellers', de Antoni Llena (2012), en la plaza de Sant Miquel; el 'Surc' (2014) en homenaje a Salvador Espriu, de Frederic Amat, en los Jardinets de Gracia, y la instalación 'Aquí hay tomate' (2004), de Eulàlia Valldosera, en el Parc del Fòrum.

En el caso de estos artistas, se trata de ver como el arte alimenta el arte, de entender como un creador se empapa de la obra de otro creador. Pero, como decía Joseph Beuys: “Todo ser humano es un artista”. Barcelona esta llena de arte, y a nosotros solo nos hace falta seguir el consejo de Antoni Llena: dejemos que las obras arraiguen.

1. Antoni Llena elige '‘La esperanza del condenado a muerte’, de Joan Miró

“Hablar de las obras de Joan Miró siempre es complicado, y es que Miró solo se revela emocionalmente, te tienes que dejar llevar. Ante 'La esperanza...' he pasado innumerables instantes tratando de entenderla. Hay una raya negra, de una gran intensidad matérica, que no se acaba de cerrar nunca. La raya dialoga con tres colores, rojo, azul y amarillo, que casi se deshacen, se desintegran. Me impresiona también la tela blanca, sin tratar, y los chorros de pintura que parecen llantos. Tener una pieza de esta importancia en Barcelona es un lujo. Miró decía: ‘Yo pinto como las gallinas, con la cabeza agachada pican el grano pero para tragar miran al cielo’. Hoy en día hay tantos condenados a muerte... pero también gente en la prisión, en el exilio. La intención de la línea negra es cerrarnos en su círculo de muerte.”

¿Dónde puedes ver la obra? 'La esperanza del condenado a muerte (1974), de Joan Miró, está compuesta por tres pinturas de 2,67 x 3,51 cada una: una de las obras más espectaculares de la Fundación Miró.

¿Quién es Antoni Llena? Nacido en Barcelona en 1942, fue pionero del arte conceptual catalán. Su obra explora las poéticas de la fragilidad, con materiales artísticamente humildes como el papel (estrujado, recortado), el alambre, el vidrio y el poliestireno. En contraste, tiene dos espectaculares monumentos en Barcelona: 'David y Goliat' (1992) en el parque de las Cascadas, y el 'Homenaje a los castellers' (2012) en la plaza de Sant Miquel.

2. Anna Dot elige '‘El orden de hoy es el desorden de mañana’, de Ian Hamilton Finlay

“Descubrí esta obra y su autor a través del poeta Eduard Escoffet. Entonces, yo vivía en Gracia. En las ciudades no tienes mucha perspectiva. Estás todo el día a tres palmos de la pantalla y, cuando miras por la ventana, a tres o cuatro metros, una fachada. Subir una montaña, aunque domesticada, con un mensaje tranquilizador en la cumbre, se convirtió en una actividad crítica; una escapada de las obsesiones del día a día, una oportunidad para pensar que “el orden de hoy es el desorden de mañana”. Que las cosas hoy son así, y mañana pueden ser de otro modo. Con la pandemia ha quedado demostrado. La obra no tiene aspecto de escultura. Puedes pasar por allá y no verla. O confundirla con bancos. Cuando subes a la montaña, descubres la amplitud del cielo y puedes lanzar la mirada bien lejos.”

¿Dónde puedes ver la obra? 'La orden de hoy es el desorden de mañana' (1999), del escultor escocés Ian Hamilton Finlay, está situada en el Parc dels Tres Turons.

¿Quién es Anna Dot? Los trabajos de Anna Dot (Vic, 1991) se centran en el entorno de la traducción y los actos comunicativos. Sus investigaciones parten de preguntas que se hace, abordándolas de formas poco habituales. Muchos de sus planteamientos tienen relación con los lenguajes y los sistemas de comunicación, y a menudo parten de referentes literarios. Últimamente explora los lenguajes gestuales. annadot.net

 3. Eulàlia Valldosera elige el ábside de Santa Eulalia de Estaón

“Buscaba figuras que encarnaran aquello sagrado femenino que todavía persiste en el primer románico. Las he encontrado al ábside de Estaón, junto a los apóstoles y los evangelistas. Más adelante en el tiempo, desaparecerán. He trabajado mucho el arquetipo de la virgen, un tipo de sucedáneo del arquetipo sagrado femenino, principio metafísico, fuente de vida, que se ha ido masculinizado. Me interesa la figura femenina como portadora de un conocimiento. Y muchos conocimientos alquímicos aparecen aquí prescritos en patrones de signos decorativos. Aparte de mis acciones performativas, estoy trabajando en obra gráfica. Y para este trabajo me interesa buscar las raíces del conocimiento, la alquimia interna, la transformación de contenidos inconscientes en conscientes. Antes trabajaba la sombra, ahora trabajo la luz.”

¿Dónde puedes ver la obra? El fresco románico del ábside de Santa Eulalia de Estaón (mediados del siglo XII) se conserva en el MNAC.

¿Quién es Eulàlia Valldosera? Nació en Vilafranca del Penedès, el 1963. Articula su trabajo alrededor del fenómeno lumínico y, mediante performances, ha abordado temas como los residuos, la limpieza, la enfermedad, la herencia materna y las relaciones de poder. Actualmente divide sus actividades entre las artes visuales y la investigación a través de la canalización. eulaliavalldosera.com

4. Frederic Amat elige 'Poema de Catalunya', de J.V. Foix

“Mi abuelo, que también se llamaba Frederic Amat, fue a la escuela con  J. V. Foix. Los dos publicaron en 'La Cònsola de Sarriá', donde sale publicado el 'Poema de Catalunya'. Y mantuvieron siempre la amistad. Con tan solo 16 años, yo le iba a enseñar mis dibujos a  Foix, al número 9 de la calle Setantí. Recuerdo un tapiz de Miró, y un dibujo dedicado de Federico García Lorca. Sobre la mesa, la máquina de escribir. Y aquel señor tan paciente y afable me leía sus poemas y me explicaba historias. Foix presentó mi segunda exposición individual y, el diciembre de 1972, me pidió ilustrar un 'Cap d'Any' donde salía el poema 'Tots hi serem al Port amb la desconeguda'. En justa correspondencia, en 2011 presenté en el cementerio de Sarriá mi película 'Una rosa...', con la voz del poeta.”

¿Dónde puedes ver la obra? El caligrama 'Poema de Catalunya', de J. V. Foix (1920), está reproducido en el suelo del cruce de vía Augusta con el paseo de la Bonanova.

¿Quién es Frederic Amat? Amat (Barcelona, 1952) es artista visual, escenógrafo, performer y director de cine, si bien su obra es difícil de categorizar. Si vives en Barcelona seguro que has visto alguna de sus obras públicas, como el Mural de las ollas en el Mercat de les Flors, el 'Surc' dedicado a Salvador Espriu en los Jardinets de Gracia y el 'Muro de ojos' en el hotel Ohla. fredericamat.com

5. Gino Rubert elige 'Desconsuelo', de Josep Llimona

“Debía de tener entre 10 y 15 años cuando la vi por primera vez, en un paseo por el parque de la Ciutadella. Fue una experiencia un punto mística porque se hizo el silencio. Todo lo que había alrededor desapareció. Como que no muestra la cara, establece un diálogo muy íntimo con el espectador. Se titula 'Desconsuelo', y esto da una pista, pero el primer impacto no era de chica desconsolada. La manera como esconde la cara y el gesto que hace con las manos son ambiguos. Si se titulara 'Felicidad', podría representar a una chica que rememora un momento feliz, o que se ríe de una frivolidad. A mí la escultura en mármol siempre me ha fascinado: su blancura, dureza, frialdad... Contrasta con la calidad 'fleshy' que representa. Yo pinto personajes con el rostro en blanco y negro, que podríamos decir que son de mármol.”

¿Dónde puedes ver la obra? La emblemática escultura en mármol de Josep Llimona, está en el Palau de la Generalitat. Hay otra versión al MNAC y una réplica en el parque de la Ciutadella.

¿Quién es Gino Rubert? Nacido en Ciudad de México, el 1969, estudió Bellas artes en la Parsons School of Design, de Nueva York. El año 2007, su obra fue seleccionada para ilustrar las portadas de la trilogía 'Millennium' de Stieg Larsson. Su pintura, figurativa, recrea conflictos afectivos y secretos de familia. Los rostros de todos sus personajes son fotografías en blanco y negro, incrustadas. ginorubert.com

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