Las 21 miradas femeninas de la exposición 'Barcelona fotògrafes'

El auge del nazismo en Europa y la proclamación de la Segunda República atrajeron a la ciudad a fotógrafas de otros países que, unidas a las creadoras locales, retrataron de primera mano la ciudad republicana y la guerra. Fotógrafas internacionales como la vanguardista Dora Maar, que se interesa por Gaudí, o Margaret Michaelis, que retrató el Raval más humilde, Gerda Taro y Kati Horna, que captaron las mujeres milicianas, la ciudad en guerra y las escenas de destrucción que dejaron los bombardeos, y también fotógrafas locales, como la corresponsal de guerra Ana Maria Martínez Sagi, que hizo reportajes en el frente de Aragón.

Durante el franquismo, y a pesar de ser excluidas del mundo profesional, las fotógrafas reivindican su trabajo, investigan y crean espacios propios de debate y relación, como por ejemplo el grupo femenino de la Agrupació Fotogràfica de Catalunya. Son integrantes Rosa Szücs del Olmo, que retrata las mujeres que se encuentra por la calle; Montserrat Vidal-Barraquer Flaquer con visiones cotidianas de la ciudad y de mujeres, como las que reparan redes en la Barceloneta; Milagros Caturla Soriano, que capta la luz de una ciudad gris de Barcelona; Rosario Martínez Rochina, que muestra el urbanismo de una ciudad fabril; y, sobre todo, Carme Garcia Padrosa, de la que hay un montón de fotos que muestran la vida desde una azotea de la calle de Carabassa, algunas de calle y otras íntimas, con mujeres que realizan tareas del hogar, bordan o tienden ropa en la azotea. También destaca el trabajo de Juana Biarnés, una de las primeras fotógrafas que trabajó para un diario de forma continuada y que capturó, entre otras imágenes, la llegada de los Beatles a Barcelona.

En la década de los años setenta las fotógrafas se hacen un lugar en los medios de comunicación y participan en la creación de nuevos lenguajes y nuevos medios, como la revista 'Vindicación Feminista'. Captan y narran las tensiones urbanas y sociales, y retratan el papel de las propias mujeres. En la exposición encontramos imágenes de Pilar Aymerich, que capturó las jornadas catalanas de la mujer de los años 70 y manifestaciones de protesta, un tema que también tocó Colita, que nos muestra además visiones íntimas insólitas, como la ropa tendida en la azotea de la Pedrera vigilada por los guerreros de Gaudí; visiones de una ciudad a menudo excluida de los imaginarios urbanos, como las barracas de la Perona, que retrató Silvia T. Colmenero 1989; mujeres como Federica Montseny o otras anónimas, que despachan en el mercado, vistas por la fotógrafa Anna Turbau; y visiones de la ciudad a cargo de fotógrafas como Anna Boyé, Guillermina Puig, Pilar Villarrazo, Marta Povo, Marta Sentís y Consuelo Bautista, que muestra, por ejemplo, la primera mezquita de la ciudad, en 1989. Miradas que exploran nuevas maneras de ver y vivir la ciudad.