La exposición antológica de Joan Miró en el antiguo Hospital de la Santa Creu el otoño-invierno del 1968-69 es el marco histórico que envuelve el nuevo proyecto de Lola Lasurt. Se inspira en la idea de juego, porque el visitó la exposición acompañado de un millar de niños en vez de hacerlo el día de la inauguración con las autoridades políticas, y también ahonda en el clima político del estado de excepción que se decretaría al día siguiente de finalizar la exposición.
Lasurt ha rastreado las hemerotecas y archivos –Casa de l'Ardiaca, biblioteca del Museo Nacional– y ha traducido en pinturas las imágenes que aparecían en los periódicos durante el estado de excepción; también ha recuperado las cartelas de las obras que Miró expuso en La Capilla, recreando su disposición. La muestra se acompaña de tres fotografías a los monumentos que el artista dio a la ciudad, realizadas en agosto de 2019, dos años después del atentado en la Rambla.
'Joc de nens' juega con otra capa de significado: la de la percepción del color. La superposición del magenta de la iluminación y el verde fosforescente de las obras convierten la propuesta de Lasurt en una experiencia física.