Estamos acostumbrados a ver esbozos en exposiciones de pintores de renombre, pero, ¿cómo es el croquis de una fotografía? Foto Colectania celebra su 20 aniversario con una exposición sobre dos de los primeros autores que formaron parte de su colección: Helena Almeida y Chema Madoz. La muestra, más allá de ser un homenaje a estos dos artistas, también es una oda al proceso creativo que se esconde detrás de la fotografía.
El título de la muestra es el de una de las primeras series fotográficas de Almeida y hace referencia al concepto de diseño en su acepción renacentista, que traspasaba los bocetos en papel para abordar todo el proceso mental, la imaginación y la creatividad del artista. Y las piezas expuestas confirman que Almeida y Madoz sobresalen en este significado el hecho de diseñar, puesto que en los esquemas preliminares de sus obras se intuye la voluntad de planificar, organizar y concebir sus fotografías.
Las imágenes y esbozos de Madoz y Almeida dialogan porque ambas comparten una voluntad de escapar del cuadro y evidenciar la farsa de la imagen. Estos juegos mentales, que nos remiten al surrealismo, ponen de manifiesto que las fotografías no son solamente capturas de instantes y objetos. Una imagen también es una idea y, como tal, no es fruto de la generación espontánea, sino que proviene del ensayo y el error del pensamiento.