1. Los primeros en aficionarse
El fotógrafo ‘amateur’ es aquel que no se dedica a la fotografía profesional, pero que conoce la teoría y que usa parte de su tiempo en tomar fotografías con un cierta habilidad. Esta forma 'amateur' de capturar momentos, entre lo artístico y lo testimonial, se remonta a los inicios de la comercialización y el uso generalizado de cámaras, a mediados del siglo XIX. Durante este período, las mejoras técnicas en las cámaras y la introducción de una nueva emulsión de plata en gelatina, que era más estable, rápida y económica, hicieron que la fotografía estuviera al alcance de un público mucho más amplio. Esto marcó el fin de su uso principalmente artesanal y su entrada en la esfera de la producción industrial y el consumo generalizado.