Col·lecció MACBA 31

'Panta rei', que decía Heráclito el oscuro. Todo fluye. Nunca te bañarás dos veces en las mismas aguas. Tampoco verás dos veces la misma colección del MACBA... Porque, ¿qué es la colección del MACBA? Más de 5.000 piezas: las unas, propiedad de los componentes del patronato de la fundación, las otras, depósito de coleccionistas, un ir y venir de veinte años registrado en 31 estratografies curatoriales.
Los DJ / curadores de turno –Ferran Barenblit y Antonia M. Perelló- han lanzado los dados. La fortuna revela tres hashtags: #Experiencia #Tiempo #Conflicto. Estamos ante una especie de sacra conversación, un ensayo interactivo que aborda la obra de arte como sistema abierto en constante transformación, se convierte en reflexión sobre percepción, cuerpo, paisaje y movimiento en el espacio / tiempo, y denuncia de conflictos e injusticias sistémicas varias. Capitalismo, represión, etc.
Hay piezas magníficas, aunque la mayoría son resultado o registro de una acción engullida por el tiempo. A veces su mérito es puramente contextual, como la acción de hacer desaparecer un papel de fumar -Benito- o de adentrarse un parterre de césped en el mar -Miralles-. La obra más espectacular es 'Entrevendo' (1970/1994), de Cildo Meireles: un gran embudo de madera con un ventilador que dispara aire caliente. Debemos ponernos en la boca dos pedazos de hielo, con forma de espiral y de onda: uno con agua salada y el otro dulce, y caminar mientras el hielo se nos funde en la boca. Sinestesia. O algo así.
También hay piezas que miran a los ojos del espectador, como '100 Jahre' (2001), de Hans-Peter Feldman: 100 personas retratadas de la misma manera, cada una un año más vieja que la otra, de un a 100 años. Y oldies famosos como 'Corpo de aria' (1959-1960), de Piero Manzoni. Ética, poética ... y algo de fetichismo.