Despertar en Ibiza
Maspons se adentra en la fotografía de forma autodidacta en los años 50 -de eso va el primer tramo de la exposición-, en contacto con la Agrupación Fotográfica de Cataluña y retratando la ciudad y sus habitantes en clave humanista. El viaje a Ibiza con la Rolleiflex en mano tendrá una relevancia especial y es que allí conocerá al fotógrafo francés René Petit, quién le abrirá las puertas al círculo fotográfico parisino y a la órbita del Club des 30 x 40, donde entrará en contacto con los grandes nombres de la disciplina: Cartier-Bresson, Sabine Weiss, Doisneu. Su maestro es Català-Roca: él le animará a establecerse como fotógrafo profesional tras su estancia en París.