1. El Lince
Desde que el nuevo proyecto de Javi Estévez (con 1 estrella Michelin en La Tasquería) abrió sus puertas, el chef madrileño no ha hecho más que recibir elogios. Y, aunque la mayoría de ellos tienen que ver con sus platos de cuchara y las recetas casqueras tradicionales actualizadas, nadie debería pasar por alto que cuenta con una terraza acristalada y convenientemente acondicionada todo el año a pie de calle. Concretamente, este espacio, que durante la friolera de 40 años lo estuvo ocupando El Lince-Casa Avelino, se ubica muy cerca de la Plaza del Perú, en la frontera entre los barrios de Nueva España e Hispanoamérica. Y su terraza, coqueta y con cierto encanto, es uno de sus muchos atractivos, tanto para aquellos que quieren ir a picar algo informal o dejarse en manos de la bartender Nagore Arregui, como para los que prefieren darse un homenaje a base de cocina honesta y sabrosa. Es aquí donde toca hablar de recetas como las mollejas de cordero al ajillo, los sesos rebozados, la oreja de cerdo con salsa brava o la tortilla en salsa de callos, además de una cuidada oferta de guisos y pescados del día. Devorarlos en buena compañía mientras disfrutas de las vistas a la animada calle de Príncipe de Vergara no tiene precio.